Margarita Ledo Andión: "Las mujeres ahora tenemos más herramientas para reconocer todos los sistemas que se labraron para someternos"
Margarita Ledo Andión recibe este año el Premio Mujeres en Acción en reconocimiento a su labor como escritora, cineasta, investigadora y docente. La organización destaca el hecho de que Ledo Andión apueste, en el ámbito académico, "por una educación en Comunicación Audiovisual con perspectiva de género". Y, como cineasta, "por utilizar el ojo de la cámara al servicio del cuerpo y de la realidad de las mujeres". Su último film 'Nación' obtuvo el Premio 2020 a la Mejor Dirección de Película Española del Festival de Cine Europeo de Sevilla y el Premio Maestro Mateo 2020 al Mejor Documental.
-¿Qué significa para tú recibir el Premio Mujeres en Acción?
Es un premio que a mí me presta porque coincide mucho con todo lo que hago en el campo académico y en el creativo. Digo esto porque la acción forma parte de lo que puedes hacer hacia las demás. Cuando hablamos de una performance, por ejemplo, es un tránsito hacia las otras personas siempre. Este premio me da alientos para hacer más cosas y me sorprende muy gratamente que sea desde un festival de teatro.
-Las Jornadas Mujeres en Acción celebran este año su 21 edición. ¿Qué cosas mudaron para las mujeres en estas dos décadas?
Yo considero que se fue pasando de la conciencia de nosotras propias y de lo que eso significa. La negación sobre la mujer fue muy insistente y muy perfecta. Cuando se luchaba, por ejemplo, contra el adulterio o el divorcio estábamos hablando del cuerpo. De repente empiezas a pensar que cuando reclamas decidir sobre tu propia reproducción, tu sexualidad, todos esos derechos pasan por el cuerpo. Esa es clave de la gran transformación. Se pasa de una posición de reivindicación teórica de derechos a una forma de reivindicación más total.
-¿Cómo ves el camino que queda por delante? ¿Eres pesimista o hay motivos para el optimismo?
Yo tiendo a ser optimista porque si no ya estaríamos indefectiblemente derrotadas. Creo que tenemos móviles para estar juntas y para seguir labrando la sororidad y todo aquello que nos unifica con los demás, lo que nos da el aliento. Tenemos más herramientas para reconocer todos los sistemas, que son muy sofisticados, que se labraron para someternos.
-Escritora, cineasta, investigadora y docente. ¿En cuál de estos campos profesionales te sientes más cómoda?
Son todos muy transversales. Los trabajos de creación siempre tienen una referencia real, carnal. Me muevo siempre entre esas líneas. Mi coherencia viene de ahí. Hago lo mismo a través de puertas diferentes.
-¿Cuál te aportó más satisfacciones?
¡Uf! No lo sé... Unas llevan a las otras. Pero si tengo que quedarme con algo, es con mi primer film ‘Santa Libertad’. Aquí ya está Mónica Camaño, que actúa en todas las otras películas. Me gustan esas obras que me permiten después continuar.
-¿Existe una manera femenina de ver el mundo y trasladarla a las creaciones artísticas?
Lo que llamamos cine en femenino tiene que ver con poner en primer lugar, en el centro, a la mujer en relación con el mundo. Y tiene que ver con deconstruir los estereotipos que la sometieron. Lo de ‘ponte guapa’, ‘calla la boca’. Tiene que ver con dejar de ser un objeto para ser visto, con la pasividad y con la dependencia.
-¿Cuál es la situación de la mujer en la cultura en Galicia?
El mundo de la cultura tiene una gran precariedad porque está desasistido. No hay conciencia- porque no quiere haberla- de que es un elemento básico. Yo trabajo fundamentalmente con mujeres actrices y creo que hay una latencia expresiva fortísima. Y puede verse cuando se trabaja con cierto tiempo, con ese espacio que hace emerger todo el potencial expresivo que me gusta y me permite hacer mis cosas. Por eso, reclamo espacio, recursos y políticas acordes con la satisfacción de esas necesidades.
-Las cifras de violencia machista siguen siendo motivo de preocupación. ¿Dónde se encuentra la solución?
En un cambio absoluto de mentalidad para localizar los mecanismos del patriarcado. Yo digo algo que me resuena a lo que el Padre Fanhais, del grupo de Zeca Afonso, dijo en la ciudad de Porto allá por el año 1975: “El proletariado tiene la misión histórica de salvar la burguesía”. Y yo digo que el feminismo tiene la misión histórica de salvar del machismo. Esa es la función del feminismo.
-Ser mujer en el siglo XXI es maravilloso porque…
...porque sabemos quién somos y porque, desde el feminismo, tenemos la capacidad de mudar las mentalidades y acabar con el patriarcado.